EL DEDO EN LA LLAGA Violencia contra las mujeres, ¿problema de salud pública? <Carmen Valls Llobet>

Carmen Valls

Cuando la tasa de mortalidad de las mujeres por insumisión ante las agresiones de su pareja o ex pareja es superior a la de la mortalidad por cáncer de cérvix en España, está claro que la violencia contra las mujeres en el ámbito doméstico debe ser considerada ya un problema de salud pública

En el primer trimestre de esta año, 33 mujeres han fallecido asesinadas a manos de las "personas que más las quieren (poseer)". Algo muy profundo y oscuro está saliendo a la superficie. Si hemos conseguido la prevención de enfermedades ginecológicas muy prevalentes mediante campañas de prevención sanitaria (citología anual), ¿por qué no hacemos lo mismo para detener esta oleada mortal?. La prevención es posible puesto que sabemos que la violencia psicológica se ejerce sobre la mujer durante años antes de pasar a la violencia física. La detección precoz del mal trato debe pasar a ser una prioridad en las agendas de salud pública de todas las autonomías del Estado.

Esta propuesta abre, por otra parte, un debate bio-ético que planteamos desde estas páginas:

¿Debe el médico/a ayudar a denunciar a la fiscalía cuando la mujer a la que atiende es víctima de malos tratos y no se atreve a denunciar?. Si lo hacemos con los niños porque los consideramos indefensos, ¿debemos hacerlo con las mujeres maltratadas, por considerar que una adulta sometida a vejaciones continuadas es en realidad una indefensa? ¿Debemos considerar que la indefensión aprendida es un obstáculo para que la mujer se anime a denunciar y por tanto ayudarla a hacerlo? Os invitamos a opinar.